En la actualidad, hay una verdad incómoda que las empresas no pueden ignorar: las amenazas cibernéticas son una realidad que ninguna organización puede pasar por alto. En este entorno, la única salida es transformarse en una empresa con resiliencia cibernética, lo que implica adoptar una nueva mentalidad, procesos actualizados y tecnologías adecuadas para hacer frente a los riesgos cibernéticos. Este cambio debe ser liderado por los responsables de la ciberseguridad en las empresas, quienes enfrentan nuevas demandas impulsadas por la transformación digital.
A pesar de que existen muchas directrices sobre seguridad cibernética, su implementación en las organizaciones suele ser insuficiente para garantizar una defensa eficaz. Como resultado, año tras año, se rompen récords en el número de ataques cibernéticos reportados.
Los Desafíos de la Resiliencia Cibernética
Uno de los problemas más críticos que enfrentan las empresas es la falta de continuidad en las medidas de seguridad digital. Con frecuencia, las herramientas y procesos de seguridad se configuran una sola vez y luego se dejan “en automático”, lo que crea una falsa sensación de seguridad. Esto hace que las estructuras de seguridad se vuelvan obsoletas, lo que facilita que las vulnerabilidades no detectadas sean explotadas por los cibercriminales.
Si bien hay ciertas automatizaciones que pueden mejorar la eficiencia, estas deben ser supervisadas y estar integradas de manera coherente con los sistemas de seguridad. La falta de integración crea brechas y aumenta la superficie de ataque, dejando a las organizaciones más expuestas.
Otro desafío importante es el gran volumen de alertas de seguridad que no pueden ser automatizadas y requieren intervención humana. La falta de personal especializado en ciberseguridad es un problema real que enfrentan muchas regiones y empresas. Para solucionar este problema, las organizaciones pueden optar por tercerizar servicios de seguridad, lo que puede ser más eficiente según el perfil de riesgo de la empresa.
El Papel de los Líderes en la Resiliencia Cibernética
El papel de los líderes en la construcción de una estrategia de resiliencia cibernética es fundamental. Su responsabilidad es garantizar que los riesgos cibernéticos se gestionen de manera eficaz, porque ninguna empresa está completamente inmune a los ataques. Los líderes deben asegurarse de que, ante un incidente, la empresa pueda responder de manera rápida y eficiente, minimizando el impacto en las operaciones.
La seguridad cibernética no es solo responsabilidad del equipo de TI; cada empleado debe estar consciente de su rol. Para ayudarte a mejorar la resiliencia cibernética en tu organización, aquí te presentamos ocho principios clave que debes seguir:
8 Principios para la Resiliencia Cibernética en la Era Digital
1. Pensar como un Líder
La ciberseguridad no debe verse como una función de soporte, sino como un diferenciador que aporta valor a la empresa. Impacta directamente en la reputación, las relaciones con los clientes y hasta en el tiempo de lanzamiento de productos al mercado. Ver la ciberseguridad como una oportunidad de negocio es clave.
2. Fomentar Alianzas Internas y Externas
Las alianzas internas ayudan a garantizar la continuidad operativa y la tolerancia al riesgo. Las externas, como las colaboraciones con otras empresas, permiten compartir información sobre amenazas y mejores prácticas.
3. Proteger el Acceso a los Activos Críticos
El principio del acceso menos privilegiado es esencial para proteger los activos más valiosos. Esto incluye medidas para prevenir ataques de phishing, que sigue siendo uno de los puntos de entrada más comunes para el malware, representando el 90% de los casos.
4. Adoptar un Enfoque de Confianza Cero
Una estrategia de confianza cero asegura que las empresas no dependan únicamente de las protecciones perimetrales. Esto se vuelve crítico cuando casi el 50% de las organizaciones no evalúan los riesgos cibernéticos de sus proveedores de hardware y software.
5. Prevenir, Monitorear y Responder a las Amenazas
Desarrollar una estrategia robusta de prevención y respuesta ante ataques es esencial. Las herramientas y procesos de seguridad deben ser adaptados a las necesidades específicas de la empresa, cubriendo a personas, procesos y tecnología de manera integral.
6. Comunicación Clara y Transparente
Informar sobre incidentes de manera oportuna es tan importante como mantener la transparencia con clientes, accionistas y reguladores. Una comunicación adecuada permite actuar a tiempo y reducir los daños.
7. Plan de Recuperación ante Desastres
Contar con un plan de recuperación bien estructurado permite a la empresa responder rápidamente ante un ataque cibernético. Este plan debe incluir protocolos para restaurar los servicios críticos y minimizar el impacto de cualquier violación de datos.
8. Crear una Cultura de Ciberseguridad
Los empleados son la primera línea de defensa. Fomentar una cultura donde todos se sientan responsables de la seguridad es clave para la resiliencia cibernética. Desde el personal operativo hasta la alta dirección, todos deben comprender la importancia de la ciberseguridad.
El Rol de la Cultura y el Liderazgo
Al final del día, los pilares de una organización resiliente en la era digital son la cultura y el liderazgo. Un líder que inspire confianza en la seguridad cibernética puede motivar a toda la empresa a priorizar la protección de sus activos digitales. Una estrategia de ciberseguridad exitosa es inseparable de la cultura organizacional. La privacidad y la confianza digital se construyen integrando la seguridad como parte del ADN de la empresa.